Una historia que valora la conservación de los bosques como una metáfora de la naturaleza y su importancia en la vida de las personas. Se trata de una narración encadenada y circular que empieza en un bosque donde un leñador tala un árbol, que él plantó, para hacer una mesa y concluye en el bosque donde una ilustradora se va a vivir y a pintar. Narrado al modo de un retablo medieval, en el que cada página cuenta un momento de la historia de la mesa y de los que vivieron alrededor. Una a puesta por la armonía entre todos los que habitan un frágil planeta.