Todos los animales que trazan sus andanzas y pasos en este nuevo volumen de la colección Monito del Monte, han habitado desde tiempos de nuestros antepasados originarios el territorio que hoy es Chile. Sus genealogías, sus características, sus cualidades, fueron observadas y descritas por quienes vivieron en esas culturas, ya sea porque los pensaron en tanto parientes, vecinos, aptos para comerlos o simplemente formando parte del entorno y de la sociedad. El Vínculo entre lo natural y lo humano es indisoluble y nos muestra que nuestras representaciones sobre el universo son las mismas hoy día que entre nuestros viejos y viejas parientas. Pero podemos comprende que los signos son su manera de concebir al quirquincho, el guanaco, la lagartija, el huemul, el gato montés, las vizcachas y el resto de los animales que olfatean, pisan y se comunican a través de estas páginas; algunos en peligro de extinción, quizás porque hemos querido olvidar nuestros lazos de afecto y de filiación con ellos.